jueves, 28 de mayo de 2009

Hoy tembló muy fuerte...dicen.

     Hoy de madrugada tembló, dicen, y muy fuerte parece que 7.1 o algo así. En mi casa nadie lo sintió excepto una visita, por la mañana nos preguntó alarmada si ‘habíamos sentido el temblorón’ a lo que toda la familia contestó que no, a los pocos minutos llamó un tío alarmado con la misma pregunta, la respuesta: parece que dormimos muuuy bien anoche pues nadie sintió el remesón. El epicentro fue en Honduras, parece que allí hay algunos daños.

     Mi cerebro se convirtió en un sismógrafo natural ¿y eso? Cuando el terremoto en Guatemala, en 1976, tal fue la experiencia traumática, muchas noches me fue dificil conciliar el sueño pues despertaba sobresaltado reviviendo la experiencia, otras tantas mientras dormía, involuntariamente movía mi cama y me sentaba alarmado pensando que ahí estaba otra vez.

     A menudo unos segundos antes de cada temblor percibo el zumbido o “rumor” previo a cada movimiento telúrico, y empiezo – ¡temblor, temblor, temblor!-  Y a los segundos ahí está. Cuando hay un temblor fuerte a veces entro en pánico –aunque solo yo lo sepa- que empiezo a buscar desesperadamente alguna ruta de escape.

     Una vez me sucedió recibiendo clases en un séptimo nivel, el movimiento empezó de menos a más, un sismo muy fuerte, a los dos segundos yo tenía lista mi laptop y resto de cosas, y el catedrático dice: -por favor guardemos la calma, guardemos la calma, por fav...- ya no terminó la frase cuando vio que yo iba corriendo hacia las gradas y, él y veinte compañeros estudiantes detrás en fila india corriendo gradas hacia abajo, cuando todo acabó soltamos en carcajadas por la reacción irracional de todos al seguirme, empezando con el catedrático. La experiencia fue un referente para el resto de cursos, lo disfrutamos cada vez que lo recordamos.

     Me alegro no haberlo sentido en ésta oportunidad, quizá no hubiera podido conciliar el sueño el resto de noche, dormí placidamente, no cabe duda.




3 comentarios:

maruluarca dijo...

Vos como yo: sueño de piedra. Claro, yo solo anoche (suerte la mía!) dormí como quien no debe nada.

elultimodepaz dijo...

O sea que tenes un sexo sentido para percibir los fenomenos extranormales

Zarek dijo...

Pues yo sí lo sentí. Desafortunadamente estaba en el décimo piso de un hotel en San Salvador. El edificio se hamaqueó de lo lindo pero lo divertido fue que pensé que no había mucho que hacer porque el edificio se caía o no y el levantarme de la cama no iba a hacer ninguna diferencia.a los diez minutos ya estaba bien dormido.